Luces y Acción

A la hora de diseñar nuestro espacio algo que es central y muy importante  es el ambiente que da la iluminación, amamos la luz cálida en nuestros hogares esta hace que los espacios sean más acogedores.

Para lograr un excelente resultado con la iluminación de un proyecto debemos tener en cuenta que debemos usar correctamente  la gramática de la luz; luz para ver, para mirar y para contemplar en una manera equilibrada. La luz para ver es la luz general y básica, la luz para mirar crea puntos de atención y mejora la percepción visual local, p.ej. en el puesto de trabajo, La luz para contemplar es  una luz decorativa que le da ese toque especial.

Una iluminación variada, con buena reproducción cromática y una temperatura de color cálida, hará que tus ambientes sean mágicos, con una puesta en escena diferente a la del día, pero con el mismo objetivo, destacar texturas, focalizar muebles y complementos, crear una atmósfera adecuada.

Una luminaria debe proveer las siguientes funciones:

• Distribuir adecuadamente la luz en el espacio
• Evitar toda causa de molestia provocada por deslumbramiento o brillo excesivo
• Satisfacer las necesidades estéticas y de ambientación del espacio al que están destinadas
• Optimizar el rendimiento energético, aprovechando la mayor cantidad de flujo luminoso entregado por una lámpara

Mediante la luz se pueden realzar las distintas zonas funcionales en el espacio: superficies transitadas, zonas de estar, superficies de exposición.

Mediante la luz se pueden definir y reinterpretar continuamente los espacios.